La música aumenta la productividad

Introducción

Si escuchas música durante tu jornada laboral, no estás solo. Una encuesta de Cloudcover Media revela que el 81% de las personas escuchan música a diario, y el 78% cree que les hace más productivos.

Investigaciones de la Universidad de Keele, presentadas a la Sociedad Británica de Psicología, muestran que los empleados que escuchan música en el trabajo experimentan efectos positivos en diversos aspectos: desde la motivación y la concentración hasta la reducción de la sensación de esfuerzo y fatiga.

La música mejora la productividad al activar los centros de recompensa del cerebro, especialmente cuando se experimenta un cambio musical nuevo o un jingle de radio antes de una canción, según un estudio publicado en PNAS por la Universidad McGill.

Ritmo y compás

La productividad puede aumentar con música de tempos rápidos y ritmos consistentes. Tendemos a sincronizarnos físicamente con la música, por lo que las canciones animadas con ritmos pegadizos pueden potenciar aún más el rendimiento en el trabajo. Estudios dirigidos por Costas Karageorghis en la Universidad de Brunel respaldan esta observación.

Un ritmo musical constante es más beneficioso para la productividad que la música con tempo variable. Un estudio del National Center for Biotechnology Information descubrió que los sonidos más variables son más distractores. Esto se aplica tanto a las conversaciones de fondo como a la música que escuchamos mientras trabajamos. Elegir un ritmo estable ayuda a aumentar la productividad y minimizar las distracciones.

El tono de la música también es importante. Una investigación publicada en Social Psychological and Personality Science encontró que las personas que escuchan música con más graves experimentan mayores niveles de poder y control, lo que influye en su percepción de capacidad y eficacia, impulsando la productividad.

Elige más música y menos palabras

Un estudio en Applied Acoustics reveló que, cuando comprendes alrededor del 20% de las palabras habladas, el rendimiento puede disminuir, y una comprensión del 30%-50% provoca una degradación aún mayor. Esto se aplica tanto a las conversaciones en la oficina como a las letras de las canciones, jingles y comunicaciones de audio.

Selecciona música que conecte

La música también puede ayudar a crear conexiones al evocar experiencias compartidas. Tal vez tú y tus colegas estén en etapas similares de la vida, recordando una canción popular de la escuela secundaria. Incluso sin recuerdos idénticos, compartir la relevancia de un período de la vida puede energizar las relaciones.

La música también puede generar recuerdos compartidos. Quizás escuchaste una lista de reproducción específica mientras tu equipo realizaba trabajo voluntario en un jardín comunitario, o pusiste música de una banda durante largos viajes hacia una reunión importante con un cliente. Estas experiencias de escucha compartida pueden recordarte los lazos y vivencias comunes, fortaleciendo las relaciones laborales.

Conclusión

Utiliza la música como una herramienta para conectar con tus colegas y potenciar la productividad.

Publicado originalmente en Forbes USA.